Por Katherine Manzur


“¡Ya no más!”, protestó la gerente de marketing en la reunión con el equipo que le pedía incrementar el presupuesto para pauta en Facebook. “Hemos invertido muchísimo dinero en esto y realmente yo no veo resultados en ventas”, desafió a su community manager y generador de contenido, esperando que alguien le explicara por qué era tan necesario “regalarte el dinero al ciberespacio en donde nadie se daba cuenta de que la empresa existía”.

Viéndolo desapasionadamente, la gerente de marketing tenía toda la razón. Sí, te lo aseguro, si tu intención al tener presencia en redes sociales es una conversión a ventas en frío, permíteme aconsejarte que cierres ahora mismo tu cuenta empresarial de Facebook, Twitter, Instagram, Tik Tok y LinkedIn…o espera un momento, tal vez no las cierres, pero sí tómate el tiempo para replantearlas y aprovecharlas con un enfoque realista.

A ver, antes de hablar de redes sociales debemos hablar de estrategia, porque en efecto, las redes son herramientas poderosas cuando se aprovechan alineadas con la misión, visión y propósito de la organización. Así que antes de abrir tus redes sociales, pregúntate: ¿cuál es tu propuesta de valor y tu producto clave? ¿Cuál es la personalidad de tu marca y la de tus clientes? ¿Con qué recursos y presupuesto cuentas para invertir en una estrategia de comunicación que incluya dichas plataformas digitales?

Cuando tienes claro tu panorama, puedes establecer tu hoja de ruta y diseñar la travesía y experiencia de tus clientes desde su primera aproximación a tu marca, hasta que se convierte en tu fiel consumidor al punto de recomendarte.

En toda esa travesía, las redes sociales son excelentes herramientas, pero debes conocer bien la personalidad y audiencia de cada una, ya que no se trata de tirar con ametralladora, sino con mira telescópica a un target específico.


Selecciona y prioriza

De acuerdo con los análisis y estadísticas la reina es Facebook. Es la que más y mejor alcance tiene para una interesante mezcla de audiencias. Es la más comercial y general, pero es importante analizar las otras que se dirigen específicamente a tu audiencia.

El reto es comprender y aprovechar bien lo que cada red ofrece.


¿Qué debes tomar en cuenta?

1. Conocer y aprovechar los algoritmos de cada red.

2. Hacer inversiones inteligentes de pauta.

3. Definir bien tus objetivos y criterios de evaluación de impacto.

4. Desarrollar el contenido idóneo para cada red específica, de acuerdo con su audiencia.

5. Escoger las redes que puedes gestionar consistente y eficientemente.

6. Asesorarte con especialistas que te apoyen para administras tus activos digitales.


Entonces, si continúas con la duda sobre la importancia de que tu marca tenga presencia en redes sociales, la respuesta es que sí es importante, pero con un enfoque estratégico intencionalmente diseñado y monitoreado.

La clave es aprovechar su alcance como parte de un plan de comunicación con objetivos bien definidos, específicos, medibles, alcanzables, relevantes, delimitados en tiempo y recursos. Al planificar objetivamente, tendrás la información necesaria para saber cómo invertir en pauta, además de qué contenido de valor brindarás a tu audiencia. ¡Inténtalo, te garantizo que no te arrepentirás!